Os comparto aquí mis interacciones y exploraciones veraniegas con Chat GPT-3 con el objetivo de probarlas con mi alumnado el curso que viene.
Creo que es esencial mostrar a nuestros estudiantes los usos positivos de la IA para el aprendizaje, en vez de verla como una amenaza. Tras mi pequeña experiencia creo que lo más interesante es el gran abanico de posibilidades de interacción lingüística y de colaboración en actividades creativas que abre. En la IA nuestro alumnado puede encontrar un aliado para todas esas cosas que les cuestan tanto, como inventar historias, crear personajes, imaginar diálogos y escenarios. Los alumnos en clase pueden seguir trabajando en grupo, en parejas… pero contar también con un asistente virtual para sacarles de esos callejones sin salida en los que se sienten a veces cuando les proponemos actividades creativas o cosas que no han hecho nunca. Por experiencia propia diré que chat GPT no te corta la imaginación, sino todo lo contrario: es muy motivador trabajar con la IA en actividades de creación conjunta.
Además, como profesores, podremos ver todo el proceso de creación gracias a la organización en temas de las diferentes conversaciones.
Os animo a probar… y a contar.
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