jueves, 2 de agosto de 2018

Los juegos sí que son para el verano (y en clase de ELE para todo el año)


En julio... ¡me he ido de juegos!


Me he dejado atrapar por la magia de este juego para contar historias : utilizando la técnica de los “myrioramas”, las 20 tarjetas ilustradas pueden colocarse en cualquier orden para crear escenas perfectas, pues aún alterando el orden, las imágenes siempre coinciden : ¡Hay más de dos trillones de posibilidades !




Días de Radio es un juego narrativo cooperativo en tiempo real que convierte a sus participantes en improvisados locutores. Aventura, ciencia ficción, terror y policial son los cuatro géneros con los que crear todo tipo de historias. Cada uno se divide en tres subgéneros, creando numerosas posibilidades de juego. Los tableros de prensa y las láminas de personaje, así como sus modos alternativos, completan esta propuesta. La caja está repleta de componentes con un perfecto diseño, entre los que destaca el  micrófono de narrador.
Es un juego con reglas sencillas y que ofrece una enorme libertad desde el principio. Puede ocurrir que alguien se quede en blanco durante su turno o que no sepa introducir una de las ideas propuestas en la historia. O que se necesite un turno extra para concluir la narración. No importa, ya que no existen las penalizaciones. Solo existe una norma de obligatorio cumplimiento: escuchar a los demás.  En resumen, un juego que ayuda a expresarse, a mejorar la comunicación y a potenciar la creatividad. 


Co-Mix es un juego narrativo en el que cada jugador tendrá que crear una página de cómic con una serie de cartas que muestran diferentes dibujos, a continuación tendrá que narrar la historia  y el resto de jugadores la puntuará. 
Este juego permite jugar individualmente y por equipos.



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 IMAGINE es uno de los mejores juegos para entrenar el pensamiento visual.Se parece mucho a Concept, su valor añadido es que se juega con cartas transparentes que se pueden superponer y mover, a modo de teatrillo o escena en 3D,  para aclarar el termino que se esconde detrás de la tarjeta. Hay tantísimas cartas que prácticamente se puede representar cualquier cosa. 

                                         

Este juego incluye un mazo de cartas muy bonitas (estilo “Dixit”), un tablero, una original “cama” que hace la función de “portacartas”, un reloj de arena y un antifaz. 
Por rondas, cada jugador se pone el antifaz y será “el soñador” durante esa noche. Al resto de jugadores se les reparte, en secreto, cartas de “Hada” y de “hombres del saco”. Se inicia el tiempo y cada jugador, por turnos, tendrá que dar una palabra que sirva de pista para que el “soñador” (a ciegas) adivine qué palabra es la que está encima de la cama. El problema es que si bien las hadas darán pistas “válidas” para que el jugador acierte, los “hombres del saco” intentarán que se equivoque.
Una vez que el “soñador” diga una palabra, la carta se coloca en el lado de “aciertos” o “errores” y se pasa a la siguiente carta… hasta que se agote el tiempo. En ese momento, el soñador deberá “contar su sueño”, creando una narración en la que deberán estar incluidas todas las palabras acertadas. 
En resumen, este juego es una inteligente evolución del concepto “Dixit” al que los roles ocultos aportan un valor añadido. Sus mecánicas giran en torno al lenguaje, por una parte por jugar con las redes semánticas (relaciones entre palabras que permitan activar otras) y por otra con la breve narración que hay que elaborar en cada fase final. 


A mis estudiantes adolescentes les encanta hacer actividades físicas en clase; si además, producen bienestar y equilibrio, el beneficio se multiplica por mil. Eduyoga consta de 27 cartas con una presentación muy cuidada. 20 cartas son de posturas de Yoga . Detrás de cada carta podemos encontrar tres apartados: “Cómo se hace”, “Cómo ayuda a nuestro cuerpo” y “Cómo ayuda a nuestro humor”.  Propone, además, dos reglas de juego: una de memoria que permite practicar las posturas y la otra, más creativa y grupal, en la que tienen que inventar y representar una historia con todas y cada una de las cartas que les hayan tocado. 



Esta colección de Filosofía visual para niños es ideal para organizar debates en clase.







Un reto "escape room" de bolsillo, un desafío en el que hay que recurrir a la inteligencia, a la destreza, a la lógica, a la rapidez mental y, por supuesto, a una buena comunicación entre los miembros del equipo. Muy interesante, también, para familiarizarnos con la dinámica y las técnicas de los Escapes Room.

                                    Y para terminar, 2 juegos de vocabulario:





¡Felices aprendizajes con los juegos!

Y también en este blog: ¿Jugamos?





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